La Toma
Atendieron reclamos por múltiples deficiencias
en viviendas del Plan Solidaridad entregadas en diciembre
Los ministros de Desarrollo Social, Alida García Peanú,
y de Obras Públicas e Infraestructura, Felipe Tomasevich, junto
a funcionarios de sus respectivos gabinetes y de la Secretaría
de la Mujer #Ni Una Menos, viajaron este miércoles por la mañana
a La Toma para interiorirzarse de los problemas planteados por familias
que habitan el barrio conocido como del ex Matadero, construido a
través del Plan Solidaridad, del Gobierno de la provincia.
Tomasevich indicó que "“el panorama es atípico
y desagradable", ya que las casas fueron entregadas sin las condiciones
mínimas de habitabilidad.
Según detalló la Agencia de Noticias San Luis, detectaron
falencias constructivas, terminaciones inapropiadas, importantes deterioros
y otros inconvenientes.
Las casas les fueron adjudicadas a 20 familias en diciembre pasado,
que le hicieron un pormenorizado detalle a los funcionarios del Ejecutivo,
agregando que sus reclamos jamás fueron atendidos.
Tras escuchar el planteo, Tomasevich les dijo que “el gobernador
Alberto Rodríguez Saá nos ha enviado no sólo
a ver, sino a solucionar el problema, por lo que ahora inspeccionaremos
todas las viviendas para atender cada inconveniente”.
Al finalizar el recorrido, el titular de Obras Públicas destacó
que “el panorama es atípico y desagradable en este grupo
de viviendas que no fueron finalizadas, ya que faltan conexiones a
las redes de agua y cloacas, hay mucha humedad, los detalles de terminación
son malos y generan un deterioro importante, además de presentar
problemas estructurales”.
“Los profesionales de Obras Públicas trabajarán
en el relevamiento final para hoy mismo pedir las primeras cotizaciones
para conectar las viviendas a los servicios de agua y cloacas, que
son los insumos necesarios, básicos y naturales que debe tener
una casa, tras lo cual nos enfocaremos en lo referente al estado de
los techos y las aberturas, como también a la humedad. El gobernador
nos ha pedido que trabajemos para solucionarles rápido el problema
a estas familias”, concluyó Tomasevich.
Para la ministra García Peanú, el estado de las unidades
“hacen que sea imposible habitarlas, de hecho de las 20 familias
sólo 9 las ocupan porque tenían miedo de que se las
retiraran. Casi todos los testimonios apuntan a que el interior se
les llueve y temen que se les vuele el techo. Además, nos explicaron
que apenas se hizo la entrega de la casa, en diciembre, presentaron
sus reclamos, pero no fueron escuchados”.
La funcionaria provincial acotó que “lo que me indicó
el gobernador es atender la parte social de estas familias, para lo
cual hemos venido con dos asistentes que realizan las entrevistas
correspondientes, a los fines de elaborar un informe social y económico.
Este grupo de casas se distingue porque viven madres solas, por lo
que el relevamiento incluye determinar la cantidad de niños,
el cuadro de salud, si todos están escolarizados, también
corroborar si hay alguna persona con discapacidad. De acuerdo a la
situación de vulnerabilidad social resolveremos las acciones
a implementar para mejorarles la calidad de vida”.
Nazarena Garro, que habita una de las viviendas del barrio del ex
Matadero, explicó que “el problema de mi casa es que
cuando llueve entra agua a la pieza de mi hijo, además de que
no tenemos agua potable. Además no tengo revoque fino”.
Otra de las vecinas que aún no se ha mudado es Carolina Albornoz:
“Todavía sigo pagando alquiler porque no he podido mudarme,
ya que la casa no está en condiciones, además faltas
elementos y, como si fuera poco, me robaron las griferías y
otras cosas. Tengo tres hijos y mi único ingreso es la asignación
universal por hijo; con $2.000 no puedo arreglar la casa”.
Estos testimonios sirven para graficar algunos problemas puntuales
y son sólo una muestra de los innumerables inconvenientes que
están soportando la mayoría de los vecinos del barrio.