79 cadetes policiales furiosos
Exigen impugnación de examen psicológico
que los dejó fuera de la fuerza policial
San Luis (Pelr) 13-02-14. Un total de 79 cadetes de la Tecnicatura
en Seguridad Ciudadana con Orientación Policial de la Provincia
de San Luis, impugnaron un examen psicológico, mediante el
cual se estableció que no estaban aptos para cumplir funciones
en la Policía provincial, pues sostienen que “sus resultados
se advierten incorrectos, arbitrarios y contrarios a los dos exámenes
realizados en oportunidades anteriores”. Uno de los abogados
patrocinantes de los cadetes le dijo a Periodistas en la red que,
los informes “estaban copiados y pegados en todos los casos”,
en referencia a que decían exactamente lo mismo, algo que prima
facie parece no posible.
Los cadetes están patrocinados por los abogados Jorge Sosa,
María Alejandra Martín y Elías Taurant y exigen
que se dé cumplimiento a lo dispuesto por la “Resolución
N° 03-PSyP-2012, art. 1, de fecha 7 de mayo de 2012, ordenando
nuestro ingreso a la Policía de la Provincia con el grado de
Alférez Ayudante”.
En un comunicado de prensa, Elías Taurant, explicó que
“resulta nada creíble, que 79 estudiantes que eran aptos
para cursar una carrera de Tecnicatura, tras superar dos exámenes
psicológicos al comienzo de sus estudios, al final de la misma,
faltando solo la entrega del título, se hayan transformado
-de la noche a la mañana- en personas no aptas para ingresar
a la Policía. Vale decir que en una promoción de una
carrera de casi dos años y medio, en los que el gobierno preparó,
capacitó, becó y evaluó, había 79 estudiantes
sin capacidad para ejercer su profesión”.
“Estas condiciones negativas no existían a principios
de 2011, cuando el gobierno de San Luis tras llamar a inscripciones
en el mes de abril y terminar de dictarla en octubre, tal como sucedió
con las siete anteriores promociones, pasaron a cumplir funciones
en la misma Policía, a la espera del decreto para comenzar
a cobrar sus haberes", aseguró el abogado.
Taurant afirmó que “desde que el gobernador Alberto Rodríguez
Saá tomó la decisión de incorporar a auxiliares
de policía -la mayoría provenientes del Plan de Inclusión-
luego de un corto curso, los cuestionamientos se hicieron escuchar
porque se consideraba que la capacitación y la preparación
física y psicológica para ejercer la función,
vestir un uniforme y portar armas, no era suficiente, y en los últimos
años, sucedieron una serie de hechos que se utilizaron para
sostener esta posición. Sin embargo, siete promociones completaron
el curso y están en servicio”.
En el año 2011 recrudecieron los cuestionamientos por lo que,
“ya en la gestión del gobernador Claudio Poggi, se decidió
que los integrantes de la octava promoción, no obstante haber
completado el curso y prestado servicios durante más de cinco
meses, deberían cursar un año y medio más de
instrucción en el Instituto de Seguridad, al cabo de los cuales,
a quienes aprobaran, se les designaría inmediatamente en el
grado de Alférez. Así se estableció en la resolución
Nº 3 de la Jefatura de Policía que se dictó en
ese entonces. Completado el nuevo curso de 1 año y medio, la
graduación, prevista para el 27 de diciembre fue suspendida
sin causa. Posteriormente, a comienzos de febrero de este año,
80 cadetes fueron citados haciéndoles saber que por un nuevo
examen psicológico habían sido declarados inaptos para
la función policial”, informó Taurant y agregó
que “es decir, que después de haber hecho dos cursos,
-en conjunto más de dos años- y aprobado todas las materias
del programa, con el estado físico requerido, se los sometió
a un nuevo examen psicológico, cuyos resultados estableció
que los auxiliares ‘adolecían de fallas que en les impide
alcanzar satisfactoriamente las competencias requeridas para el puesto’,
mientras algunos alumnos de la misma promoción ingresaron a
la institución pese a no haber aprobado el examen psicológico
correspondiente”.
Estos cadetes, a pesar de no haber podido ingresar a la fuerza policial
por no aprobar el examen psicológico, “el lunes 3 y martes
4 de febrero fueron convocados y en atención al ‘presunto’
resultado negativo del examen y se les ofreció un contrato
categoría ‘E’ en la Administración Pública,
en el ámbito del Ministerio de Seguridad, por el término
de 3 meses, con una remuneración de $ 4.200”, explicó
Taurant.
Por todo esto, “los afectados pidieron al rector del Instituto
de Seguridad, Jorge Handanoniu, que deje sin efecto el informe, recordando
que ya han superado dos exámenes psicofísicos a su ingreso
a los cursos respectivos y en forma consecuente se cumpla con la resolución
aludida, realizándose en forma urgente todos los trámites
necesario que les permita ingresar con el grado de Alférez
Ayudante a la Policía de la Provincia”.
Finalmente Taurant aseguró que la medida gubernamental, “además
de vulnerar groseramente derechos constitucionales, indica preocupantes
fallas en la organización y dirección de la fuerza policial,
en tanto se ha actuado con increíble torpeza, atropellando
elementales normas del derecho y revelando graves deficiencias en
la formación de los hombres que van a tener la alta responsabilidad
de resguardar los derechos de los ciudadanos”.
Informe: Carlos Rubén Capella
carlosrcapella@yahoo.com.ar