¿En la municipalidad capitalina nos toman por estúpidos?
San Luis (Pelr) 06-01-09. Pareciera ser que la política de
los funcionarios municipales es hacer ‘bombo’ de cualquier
cosa, para poder ‘tapar’ la ineficacia más que
evidente que han demostrado en más de un año de gestión,
toda vez que en declaraciones a la prensa, el responsable del área
transporte, Guillermo Godoy, que “si tenemos en cuenta la calidad
de la prestación podemos afirmar que el impacto en la ciudadanía
ha sido muy positivo”.
Y la pregunta del millón, que se cae de madura, es ¿Puede
Godoy decir en el primer día de prestación del servicio
que el impacto “ha sido positivo”? ¿Puede Godoy
hacer esta aseveración en el primer día, cuando los
usuarios protestaron, en ese mismo primer día, porque la frecuencia
no es de lo mejor?
Cuando algo no se puede salvar, la mejor estrategia es mantener el
silencio, porque no se puede salir a hacer este tipo de declaraciones
en medio de las protestas de los usuarios, porque esto no es, ni más
ni menos, que tratar de estúpidos a quienes, precisamente,
sufren del mal servicio.
Otra cosa que llama la atención, es cómo desde el municipio,
a través de su Dirección de Prensa, se emiten comunicados
a diario, resaltando la “excelencia” de una empresa nueva,
siendo ellos sus mejores publicistas.
No caben dudas de que este tipo de publicidad excesiva que hace el
municipio de la nueva empresa, no es otra cosa que un mero intento
por tapar su ineficacia, demostrada al extremo, para poder lograr
la licitación pública que le de a la ciudad transporte
por cinco años, como manda la ley.
Pensar que estos mismos funcionarios fueron los que le pidieron a
Alfonso Vergés que no llamara a licitación para la concesión
del transporte urbano, en noviembre de 2007, porque a un mes de finalizar
su gestión, no podía dejarles una herencia para todo
su mandato. Pensar que si le hubieran pedido a Vergés que llamara
a esa licitación, como marcaba la ley en noviembre de 2007,
sin importar si se iba o no un mes más tarde, hoy no tendrían
el problema encima.
Es más que obvio que la gestión Lemme, va a tardar
por lo menos dos años de su mandato, en intentar llevar adelante
la licitación por el transporte urbano, lo que transforma el
tema en un verdadero fracaso funcional.
Si a esto le sumamos que dentro de sus promesas electorales, había
señalado que haría la nueva Terminal de Ómnibus
en el predio de la ex Estación de Trenes, que ella “sabía
como hacerlo”, pero que ahora la realidad demuestra que, al
menos en ese lugar, es imposible hacer nada, puesto que es propiedad
de la nación, podemos sumarle un segundo fracaso a Lemme y
compañía, en apenas un poco más de un año
de gestión.
Informe: Carlos Rubén Capella
carlosrcapella@yahoo.com.ar
Largas colas, colectivos llenos, una imagen que se repitió durante
todo el día en las paradas céntricas